martes, 24 de enero de 2012
QUE SE DETENGA EL TIEMPO
Que se detenga el tiempo, me decías
y el tiempo se callaba y repetía sus ciclos
esféricos, iguales y cansinos,
como la música del viejo organillero.
El tiempo no se detiene nunca
ni se demora nunca,
es tiempo muerto
vagabundo y sin sombra
y nos mantiene dentro
de su espiral profunda.
No es tiempo lo que pasa
eso que vemos
pasar como días estériles,
caducos y perplejos
No es tiempo lo que pasa.
Nosotros caminamos por el tiempo
y en el momento crucial nos detenemos,
nos bajamos del tiempo y esperamos
junto a las vías muertas de los trenes,
hasta que el tiempo se convierte en pasajero.
Y reiniciamos entonces la marcha
por el tiempo.
<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Acaso, el tiempo, sea eso que nos tiene hechizados o engañados e incluso, anclados.
ResponderEliminarNo es el tiempo lo que pasa sobre nosotros, sino nosotros los que por el pasamos.
Besos
Pues si, Reina mía. Algo he visto que fallaba en el poema, y al final lo he rectificado en mi cuaderno; para hacerlo aquí tendré que borrarlo. Termina diciendo :"Hasta que el tiempo nos convierta de nuevo en pasajeros". Creo que es más verosímil, ¿no?
ResponderEliminarUn beso.
"El tiempo es el mejor autor, siempre encuentra un final perfecto." Charles Chaplin.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho tu blog, espero no te importe que siga pasado por aquí.
Besos
Encantada de que lo hagas, José Manuel y gacias por la cita. Es perfecta e ingeniosa, como el autor.
ResponderEliminar